lunes, 29 de diciembre de 2014

¿Sufres de Alexitimia? Descúbrelo aquí

¿Alexiqué?. La Alexitimia se trata de una incapacidad de expresar emociones verbalmente y de cierta dificultad a la hora de distinguir estados emocionales de sensaciones físicas.




¿Te imaginas no poder decirle a alguien que lo amas? ¿O no entender qué sientes por tu pareja, si lo amas o solo quieres ser su amigo? Puede que te haya pasadoalguna vez, pero cuando la sensación es recurrente podría tratarse de un trastorno llamado alexitimia.
¿Alexiqué? Se trata de una incapacidad de expresar emociones verbalmente y de cierta dificultad a la hora de distinguir estados emocionales de sensaciones físicas, tal como define una investigación publicada en 2006 en la revista científica Journal of Autism and Developmental Disorders.
Dime qué te sucede
En las relaciones de pareja puede haber momentos mágicos, como también momentos de tensión, drama y peleas interminables. Siempre conviene conversar y tratar de entender qué le sucede al otro. El problema surge cuando alguno de los dos sencillamente no puede expresar lo que siente.
Entiende que le sudan las manos, le duele la barriga o se siente mareado, pero es incapaz de identificar si la emoción detrás de estos síntomas es alegría, tristeza o enfado. Así lo explica el investigador Nick Frye-Cox en un comunicado de prensa de la Universidad de Missouri, recopilado en el sitio Psych Central.
Frye-Cox, autor de un estudio al respecto publicado en 2013 en la revista científica Journal of Family Psychology, añade que las personas con alexitimia tienen dificultades para discernir las causas de sus sentimientos o explicar las variaciones en sus emociones. “Tienen problemas al relacionarse con otros y tienden a sentirse incómodos en las conversaciones”, señala.
¿Me quieres o no me quieres?
De acuerdo con un artículo publicado en el periódico ABC de España, la alexitimia puede ser de dos tipos, según su origen:
· Primaria: producida porque las estructuras neurológicas vinculadas con las emociones están dañadas.
· Secundaria: como consecuencia de un trauma emocional grave o por un desorden en el aprendizaje emocional.
No estamos hablando de personas sin corazón que no tienen emociones ni sentimientos, sino que presentan una dificultad mayor para conectarse con ellos, reconocerlos y expresarlos a viva voz. En el artículo recién mencionado, el profesor Pablo Duque, coordinador de la Sección de Neuropsicología de la Sociedad Española de Neurología, explica que esta condición “es típica en pacientes que han sufrido enfermedades o trastornos neurológicos o psiquiátricos (accidentes vasculares, traumatismos craneoencefálicos, tumores) pero donde más aparece es en los trastornos afectivos, como síndromes depresivos, ciclotimia, etc. Podríamos decir que la alexitimia es un signo o un síntoma de un trastorno”.
A todos nos ha pasado
No te sientas mal si el chico o la chica con quien sales aún no te ha dicho te quiero o te amo. Puede que a algunos les lleve un poco más de tiempo que a otros conectarse con sus emociones. Así que, ¡a no desesperar! Las palabras siempre llegan y, si no, ¡por algo será!
Eso sí, si notas que tienes dificultad para expresar o conectarte con tus sentimientos, no dudes en acudir a un especialista de la salud.


lunes, 22 de diciembre de 2014

Parafilias: atrévete a conocer el lado oscuro del sexo

Descubre qué es una parafilia y cuáles son algunas de las principales.



Primero, es importante distinguir entre parafilia y fetichismo. Coloquialmente se utiliza el concepto de parafilia o filias sexuales para definir todas aquellas conductas que parecen “distintas” a las “normales”. Entiéndase, normal desde el concepto estadístico, es decir, comunes. Cualquier conducta sexual que se salga de lo común es, para el entendimiento social, un fetiche. Esta concepción está equivocada.
La confusión se debe en gran parte a la evolución histórica de los conceptos, pero para lograr claridad, vayamos a lo reciente. En la actualidad, cuando nos referimos a conductas sexuales que se desvían, estadísticamente, de lo normal, se habla de parafilias (o de conductas sexuales diversas) y existen distintos tipos:
  • Exhibicionismo. Placer por la exposición de genitales a extraños.
  • Fetichismo. Excitación con el uso de objetos no vivientes (zapatos y lencería, entre otros.)
  • Frotteurismo.Tocar o frotarse contra otra persona sin consentimiento.
  • Pedofilia. El foco de interés sexual descansa en niño(as) pre -púberes.
  • Masoquismo sexual. Placer ante la recepción de humillación o sufrimiento.
  • Sadismo sexual. Placer ante infligir humillación o sufrimiento.
  • Fetichismo transvestista. Utilización de prendas del sexo opuesto.
  • Voyeurismo. Placer ante la observación de actividad sexual (no siempre consensual).
Como se puede observar, el fetichismo es tan sólo una parafilia más. ¡Ojo! No toda conducta diferente o cualquier rasgo de la lista previa equivalen al diagnóstico de una. Para que alguna persona sea diagnosticada con ello, debe cumplir ciertos criterios de tiempo de duración y generar malestar a la persona. Este último criterio se vuelve muy relevante, ya que la mayoría de las personas con alguna parafilia no suelen expresarlo o “confesarlo”.
Es probable que aunque las personas no vayan por la vida diciendo que son “voyeristas”, por poner un ejemplo, sí puedan llegar a consulta en terapia sexual, por algún problema legal o social.
En el caso de la pedofilia, suelen asistir porque se les descubre. En el caso del frotteurismo, suelen ser detenidos en zonas urbanas como el transporte público, y así con algunas implicaciones de cada parafilia. Sin embargo, cuando se trata de una persona con el diagnóstico de parafilia de masoquismo que encuentra a una pareja con diagnóstico de sadismo, no les suele generar ningún “malestar”, pues de alguna manera aunque la conducta sea “estadísticamente desviada” y lleve “más de seis meses”, no es algo que les incomode a ninguno de los involucrados.
En otras palabras, si no les está generando un problema con su pareja, con la ley o en su cotidianidad, es muy difícil que decidan ir a terapia o que consideren sus conductas sexuales como problemáticas. Así, es sumamente complejo saber la incidencia o frecuencia de cada una.
Lo que si podemos concluir es que toda expresión de la sexualidad es válida, siempre y cuando no atente contra terceros, que todos los involucrados estén capacitados y hayan otorgado su consentimiento. Aún con esto, no está de más mencionar que quien sufra de una parafilia debe saber que si ésta representa un problema que ha afectando su vida de manera negativa (o la de terceros), existen alternativas de tratamiento psicoterapéutico y personal especializado para apoyarlos.